Aún no hay palabras para confortar un corazón angustiado, pero aún pero no existen ni existirán palabras para sanar el dolor de la perdida de un ser amado, de una persona de luz y corazón, eso es lo que en realidad llena de pesar todo el instante del duelo, doloroso e inevitable...
Creo que cuando el tiempo pase dejará de doler, pero no dejará de extrañarse...
Donde quiera que estés, abrázala de mi y no olvides a tu corazón...
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